Buenos días, diario. Esta semana no he parado con la novela de Arynd. Ha sido un período fructífero.
La imaginación, sin embargo, tiene límites. A veces uno necesita descansar y escribir otras cosas.
Para eso tengo una libreta para poder escribir cualquier locura que me pase por la cabeza.
Y funciona.
Añadir comentario
Comentarios